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Aventura por el Atlántico de Colombia en moto parte 5



Decidido aquel día a salir para el tayrona, me aliste me lleve mi moto y continué por la vía, llegue alrededor de las 4 apresurado por entrar, lo primero es que los pondrán a ver un video del parque donde muestran que encontraran adentro, que animales playas y demás.

Luego de esto deje mi moto en el parqueadero, y me adentre en aquella selva maravillosa, ojo si van no pueden ir tan tarde por que ya que después de las 5 no dejan entrar a nadie, luego continua caminando, que energía tan mágica rodeaba el lugar, lo mas insólito es que cada viajero o viajera que volvía por el camino, saludaba con una felicidad y energía, que ya quería llegar.
Este recorrido dura mas o menos 45 minutos que se me pasaron corriendo, pero no escuchas nada de mar, la curiosidad me mataba y ya quería llegar ver la playa, es como cuando esperas con ansias que llegue aque momento, y cada minuto y segundo, se hace largo, y no sabes en que momento llegaras.

Debo decir que sentía una felicidad de cuando vas a conocer o hacer algo por primeras vez, o cuando te vas a encontrar con esa persona que te gusta y tienes un poco de miedo o esa sensación, de no saber que va a pasar y quieres que llegue ya.

De un momento empezó a oírse a lo lejos el rugido del mar, aque sonido relajante que me llenaba de paz, en aque momento vi una pequeña montaña, con unos escalones en piedra y me apresure a seguir subiendo, cada paso sabia que estaba mas cerca de aquel lugar en que tantas veces soñé estar.

Seguí subiendo y al llegar quede mas que extasiado, fue  increíble un paisaje único de todos los que  he conocido, atrás de mi se podía ver aquella insólita selva en medio de la costa al otro lado una enorme y linda playa, y unas piedras gigantes que le daban el toque  mágico al lugar.

Dure unos minutos contemplando aquel lugar y continué con mi camino en lugares aun se veía la selva y luego solo playa, continué hasta llegar a arrecife una de las playas, cabe decir que muchas de estas  playas, no son aptas para bañistas, al llegar allí, cogí mi equipaje lo deje en el suelo y solo pude sentarme a contemplar aque lugar.

Que ni en mis sueños había imaginado, aquel día estaba un poco nublado, así que al empezar a caer la noche se podía ver, a los lejos la oscuridad y se veía que venia una tormenta, cuando oscureció un poco mas era, delirante aquel mar, ya que en el fondo caían rayos, que alumbraban todo a su paso.

No se la verdad cuanto tiempo pase allí sentado, deleitándome, con aquel majestuoso atardecer, no me importo que en el fondo de aquel mar hubieran truenos, simplemente estaba en otro mundo, sentía tanta paz, que definitivamente no quería irme de allí, sentía paz y eso solo era el comienzo...




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Gracias por comentar, Felices rutas y te espero en el proximo viaje¡

 
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